Si eres de las que se ha vuelto una súper fan del joven empresario Christian Grey, vive enganchada a la trilogía más vendida de los últimos tiempos y no deja de sorprenderse por todas las cosas nuevas que está descubriendo en torno a la sexualidad, hoy os vamos a definir algunos de los términos más utilizados en el mundillo BDSM.
Si estás harta de la rutina, tu relación puede definirse como algo “vainilla”, ese término que describe tan eufemísticamente una relación sumamente monótona, y quieres darle vidilla a tu dormitorio, (o a cualquier otro escenario menos convencional y más innovador), debes tomar nota de estos apuntes que te vamos a dar. Son básicos y muy necesarios para empezar a codearte con practicantes de las disciplinas más novedosas del sexo no convencional.
Prepárate para aprender, y no dejar de sorprenderte con las prácticas más extrañas.
BDSM.
EL BDSM es considerado ya una subcultura por el alcance que tiene. Es un término que fue acuñado en el año 1991, para englobar la diversidad de prácticas, formas de hacer sexo, normas e incluso formas de vivir que giran en torno al Bondage, a la disciplina, la Dominación/Sumisión y al Sadomasoquismo.
Dominación/Sumisión.
Son los dos roles del BDSM. Las prácticas son infinitas, pero es totalmente necesario que el poder se reparta de esa manera aunque en determinados momentos de la relación se intercambie. Un amo o dominante, siempre tiene poder sobre el esclavo o sumiso.
Masoquismo y sadomasoquismo.
Son los términos que definen la relación de poder entre miembros y el dolor con el placer. El masoquista suele ser el sumiso, y el dominante es sádico, disfruta infringiendo dolor al sumiso.
Fornilia: esclavo-objeto.
¿A qué te suena este “palabro”. Pues la fornilia no es ni más ni menos que una parafilia que consiste en “objetificar” a las personas, es decir, utilizarlas como un objeto totalmente definido, por ejemplo un mueble. Los amos que practican la fornilia hacen de sus esclavos sumisos un mueble en particular: por ejemplo una mesa. Y lo utilizan como tal: le ponen vasos encima, o platos con comida; quizás ven al sumiso como una silla y lo utilizan para sentarse, etc.
Shibari, o Bondage japonés.
La práctica de los atamientos o Bondage es una de las prácticas más comunes en la subcultura BDSM. Se trata de una rama muy sensual y refinada del BDSM. El Bondage utiliza los atamientos para inmovilizar, aunque en realidad nos son necesarios. El Shibari por otra parte, así como en Kimbaku tienen como objetivo la inmovilización basada en el arte del encordamiento. Es decir, lo importante es la forma de atar al sumiso, de hecho existe una línea de encordamientos estéticos.
SSC (Safe, Sane and Consensual)
El BDSM incluye entre sus rutinas la práctica de sexo con extraños, además de prácticas extremas. Por eso es importante llegar a un acuerdo para determinar una palabra o un término clave con el que pedir que el amo pare cuando se traspasan los límites. Y es que hay que tener en cuenta que se pueden crear situaciones de mucha indefensión, sobre todo en la situación del miembro sumiso.
El término SSC fue acuñado en 1983 por David Stein, con la intención de desvincular las prácticas BDSM de lo que la gente en general consideraban malos tratos. Se quería dar la imagen de que las prácticas BDSM eran seguras, porque era algo pactado y consensuado en las que el dolor, el riesgo y el peligro eran parte del juego de placer.
Scarfing (sólo para expertos)
El scarfing es la práctica de estrangulamiento durante el sexo. Normalmente se utiliza un fular, un pañuelo o una bufanda para cortar la respiración de forma parcial. Es una de las rutinas BDSM más peligrosas. Muchas personas han fallecido haciendo Scarfing. El morbo reside en el dominio absoluto de la vida por parte del amo, y en la falta de oxígeno en el sumiso, que provoca una mayor intensidad en el orgasmo.
Si te vas a iniciar en este mundo, hazlo con personas de confianza o en clubes especializados. Pueden darse situaciones muy desagradables si no hay confianza y entendimiento. Todo lo que hace Grey… no es lo que le gusta a todo el mundo. Así que si lo pruebas y no te gusta, debes tener la certeza de poder.
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